Entrevista en El Comercio: cómo mejoramos la calidad de vida de los pacientes en menos tiempo
El Comercio entrevista a nuestro Director Clínico para hablar de lo que significa Rehabilitación Avanzada y cómo esta metodología mejora la calidad de vida de los pacientes en el menor tiempo posible.
Desde INYPEMA hacemos un esfuerzo importante en divulgar nuestra actividad para llegar a más personas con todo tipo de problemas y ayudarles, en la medida de lo posible, a recuperar su calidad de vida. El Comercio ha entrevistado recientemente a nuestro Director Clínico, Sergio Rodríguez, para hablar de los distintos tipos de tratamientos que ofrecemos en INYPEMA.
De la entrevista destacan nuestras cinco unidades de intervención que “responden a tratamientos de diferentes tipos de poblaciones: Unidad de Neurorrehabilitación Avanzada, enfocada a personas con ictus, Parkinson, esclerosis..., Unidad de Rehabilitación Traumatológica y Deportiva, donde trabajamos con personas con lumbalgias, cervicalgias, fracturas, lesiones deportivas, dolor…. Unidad de Neuromodulación, en la que utilizamos TMS y TDCS para tratar la depresión, el TOC, la ansiedad, determinados síntomas motores… Unidad de Rehabilitación Infanto-Juvenil, en la que trabajamos a diario con niños con TEA, Síndrome de Down, TDAH, Parálisis Cerebral… y la Unidad de Rehabilitación Cardíaca”.
La Rehabilitación Cardíaca es fundamental para INYPEMA. Las patologías cardiacas son la primera causa de muerte en Asturias y por eso, nuestro director clínico ha querido aprovechar la entrevista para hacer especial hincapié en nuestros programas de rehabilitación cardiaca, un tipo de rehabilitación muy efectiva pero que, debido al desconocimiento, aún no está suficientemente extendida: “Nuestra Unidad de Rehabilitación Cardiaca es la primera unidad privada de este tipo en Asturias y en la que trabajamos con personas que han tenido algún episodio coronario o están en riesgo de padecerlo.”
Te dejamos el acceso completo a la entrevista en el siguiente enlace.
Sergio Rodríguez. Foto: Alex Piña, El Comercio.
